Esta mansión tan peculiar se construyó en el siglo XVIII, fue un parador y casa de labranza, hasta que el siglo XIX fue comparada por una marquesa poniendo a la casa un estilo árabe, la utilizó como casa de verano y cuando falleció quedó en el olvido...
El acceso a esta casa era bastante complicado, no por el acceso en sí, sino por los vecinos de alrededor, la primera vez que fuimos había mucha gente por la calle y no pudimos acceder, decidimos que la próxima vez iríamos a la hora de la comida.
La segunda vez, no nos lo pensamos, sin nadie que nos pudiera ver, saltamos el muro de unos 2 metros, al otro lado del muro había un colchón y un bidón estrategicamente colocados.
una vez dentro del recinto recorrimos el sendero hasta llegar a la puerta trasera del patio.
La casa estaba bastante vandalizada y llena de grafitis pero aún así tenía su encanto.
La visitamos en mayo de 2018.
La visitamos en mayo de 2018.
Espero que os guste.
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En el patio central se escontraba una carroza bastante vandalizada, recuerdo que no nos pudimos acercar porque estaba el patio plagadito de avispas...
Subamos al piso de arriba...
¡Nos vemos en la próxima entrada!
