domingo, 10 de noviembre de 2019

La casita del 85

Esta pequeña casita decadente nos la encontramos de casualidad, estaba la puerta abierta de par en par en mitad de una carrtera convencional, aparcamos el coche donde no estorbara y nos adentramos a su interior. 
Su último año de vida según el calendario de la cocina fue en 1985. No pudimos averiguar nada más de esa casita. Estuvimos muy poco tiempo e hicimos poquitas fotos, estaba diluviando, la cámara mojándose y temiamos que se nos cayera la casa encima.

Nada más entrar nos encontramos con un pequeño salón, con la mesa puesta y todo comido por la humedad que había dentro.




Se comunicaba con la cocina que estaba llena de cacharros.




La cocina se comunicaba con una especie de despensa-almacén o un ¿bar? no lo conseguimos descubrir.


Subimos arriba por el lado de la pared, con mucha precaución y cuidado, las escaleras eran de madera y a cada paso que dábamos crujian y se hundia. Conseguimos subir, pero el suelo estaba aún peor.


Yo, al pesar menos, me adentré con cuidado a las habitaciones.
En esta habitación la cama iba a terminar en el piso de abajo, es cuestión de tiempo.


Aquí se observa mejor el suelo de esa habitación como estaba.


Seguimos por las demás estancias...
Esta habitación era la que mejor estaba, aún con la ropa colgada en el armario.



La última habitación que me pude asomar fue esta, la mitad de la cama estaba en el piso de abajo la otra mitad arriba.
Lo que no vimos fue ningún baño, me imagino que estaría al final del pasillo que no pudimos acceder.


Este es el tipo de casas que nos encanta visitar, la decadencia por el paso del tiempo, sin vandalizar.
Al salir nos sentimos un poco ñoños y con nostalgia, era una casita antigua que lo más probable fallecieran los dueños y se quedó en el olvido.
¡Nos vemos en la próxima!